El megalodón o megalodonte (Carcharodon megalodon o Carcharocles megalodon), nombre que significa «diente grande» , es una especie extinta de tiburón que vivió hace entre 19,8 y 2,6 millones de años, aproximadamente, durante el Cenozoico (de inicios del Mioceno hasta el final del Plioceno).
Es considerado como uno de los mayores y más poderosos depredadores en la historia de los vertebrados. Los estudios sugieren que el megalodón lucía en vida como una versión corpulenta del gran tiburón blanco actual, con la diferencia que podía alcanzar los 18 metros de longitud total máxima (¡una auténtica locura!).
El megalodón fue un misterio que nos hizo preguntarnos si es que existió en verdad, era una invención de nuestros antepasados (ya que tendían a crear míticas historias sobre seres sobrenaturales), o es que realmente hubo un tiburón prehistórico que habitó nuestros mares siendo el rey de la cadena trófica y el terror de sus congéneres.
Pero según largas investigaciones y reconstrucción de fósiles, se puede llegar a la conclusión de que si, el megalodón existió y habitó nuestros océanos.
Los dientes de tiburón son los fósiles más comunes del mundo y esto se debe a que un tiburón puede reponer en ¡20.000 y 30.000 dientes durante toda su vida! y mientras se encuentran en el fondo del mar durante millones de años, los minerales van reemplazando la materia orgánica hasta convertirlos en fósiles.
Pero si un tiburón muda tantos dientes durante su vida, ¿por qué hay tan pocos dientes de megalodon?
La explicación más plausible a esta pregunta es que el carcharodon era un depredador superior. Generalmente los depredadores superiores son mucho menores en número que los animales normales. Si por ejemplo pensamos en los leones, estos son relativamente pocos en relación con las cebras u otros animales de los que los leones se alimentan.
Un megalodon puede haber matado grupos enteros de ballenas o de delfines. Un principio básico de la biología asegura que cuanto más grande es un animal, menos de estos hay. Esto explica porque se han encontrado tan pocos dientes en comparación con la cantidad de dientes que se encuentran de tiburón.
Lamentablemente, debido al hecho de que no toda la información ha sido determinada con respecto a estos seres increíbles, la absoluta razón de por qué todos ellos murieron es desconocida.
Sin embargo, hay algunas teorías que podrían explicar la extinción de estos animales. Dos de las principales especulaciones realmente coinciden con la creencia de que estos tiburones nadaban en aguas cálidas.
Durante el tiempo en que estos tiburones seguían vivos, la temperatura de los océanos comenzó a disminuir. La constante baja de temperatura de los océanos puede muy bien ser lo que mató el tiburón Megalodón.
Otra creencia es que la antigua presa preferida del tiburón comenzó a migrar a aguas más frías. Estas aguas de baja temperatura probablemente eran demasiado frías para que el Megalodón sobreviviese.
Temática sugerida por: ROony Arce
Fuentes: