La política es definida como la ciencia que se ocupa de la organización y el gobierno de las sociedades humanas, especialmente de los estados. También puede entenderse como la actividad de aquellos que gobiernan o aspiran a gobernar los asuntos de la sociedad o de un país. Aunque algunos la consideran una herramienta fundamental para el progreso y bienestar común, la política tiene su lado oscuro, especialmente cuando se ve influenciada por intereses particulares y no por el bien colectivo.
A lo largo de la historia, la política ha sido objeto de controversias. Ha sido alabada por quienes creen en su poder para transformar y mejorar las condiciones de vida, mientras que otros la ven con desconfianza por el egoísmo que a menudo guía las decisiones de aquellos en el poder. La corrupción, tristemente, ha sido un fenómeno asociado con la política, ya que muchos políticos han utilizado su posición para obtener beneficios personales a costa del bienestar general.
Este mal uso de la política ha generado un ciclo de desconfianza, pero también ha originado movimientos que luchan por una política más justa y transparente. Aunque el objetivo original de la política es el bienestar común, la constante vigilancia de la sociedad civil es crucial para garantizar que no se desvíe hacia intereses propios.