Ir al contenido
Casa hecha de cerillas en llamas. Incendio de vivienda con cerillas. Riesgo de fuego.

¿Qué hacer en caso de incendio? Guía rápida que puede salvar tu vida

A+A-
Reset

“A mí no me va a pasar”. Esa es la frase más común antes de que ocurra un incendio doméstico. Pero lo cierto es que nadie está exento. Tener conocimientos básicos puede marcar la diferencia entre un buen susto y una tragedia.

Lo primero que hay que saber es que el humo es uno de los mayores peligros: desorienta, irrita los ojos, dificulta la respiración y puede bloquear completamente la visibilidad. En ese escenario, es fácil perder la ubicación de puertas, pasillos o salidas. Por eso, si hay mucho humo, lo ideal es mantenerse agachado y, si está completamente oscuro, seguir la línea de una pared sin separarse de ella. Es un truco simple, pero efectivo para no perder la orientación.

Además, nunca abras una puerta sin tocarla primero: si está muy caliente, puede haber fuego al otro lado. Y si el humo ya ha invadido el ambiente, cubre tu nariz y boca con un trapo húmedo.

Contar con detectores de humo, extintores domésticos y un plan de evacuación claro puede salvar vidas. Practicarlo con tu familia una vez al año no es exagerado: es prevención pura.

Recuerda que el fuego no solo consume objetos, también puede tomar vidas en segundos. Estar preparado no te hace paranoico, te hace responsable.

Y no, no estás exagerando por querer aprender. La diferencia entre el “a mí no me va a pasar” y el “ojalá lo hubiera sabido antes”, puede ser abismal.

Incendio de edificio. Bomberos combatiendo fuego. Desastre nocturno.

Cómo actuar durante un incendio: lo que realmente importa

Durante un incendio, los gases tóxicos pueden matar, el humo te inmoviliza y el calor intenso agota rápidamente tus fuerzas. Aunque todos los incendios comparten una base química similar, su evolución es impredecible. Por eso, no hay que confiarse: un pequeño foco puede volverse incontrolable en segundos.

Primero, entendé esto: los incendios son mucho más comunes de lo que creemos. Nadie está exento. De hecho, desde un cortocircuito hasta una simple vela mal apagada pueden desencadenar el desastre.

Entonces, ¿qué hacer?

1. Abandona el edificio lo antes posible. Parece una obviedad, pero muchas personas se detienen a buscar objetos personales, lo que puede ser fatal. Tu vida vale más que cualquier cosa.

2. No uses ascensores. En una situación de fuego, el ascensor puede fallar o convertirse en una trampa mortal. Bajá siempre por las escaleras.

3. Toca las puertas antes de abrirlas. Si están muy calientes, no las abras: hay fuego del otro lado.

4. Mantente lo más cerca del suelo posible. El humo sube, así que gatear o agacharse aumenta tus probabilidades de escapar.

5. Tapa tu nariz y boca con un trapo húmedo. Filtrar el aire, aunque sea mínimamente, puede ayudarte a respirar mejor mientras salís.

En un incendio, cada segundo cuenta. No improvises. Tener claro qué hacer y actuar rápido puede salvarte la vida.

¿Qué hacer en caso de incendio? Guía rápida que puede salvar tu vida | 1

Consejos clave para evacuar un incendio de forma segura

Si te encuentras atrapado en un incendio, mantener la calma es clave. Pero además de conservar la cabeza fría, hay ciertos pasos que pueden marcar la diferencia entre salir a salvo o no. Toma nota:

2. Si hay mucho humo, mantente lo más cerca del suelo mientras te dirigís hacia la salida. El humo caliente y los gases tóxicos tienden a subir, por lo que desplazarte agachado o gateando mejora tus posibilidades de respirar aire más limpio. Si puedes, cubrí tu nariz y boca con un paño húmedo. Y si tienes acceso a uno, lleva un extintor: puede ayudarte a abrirte paso o ganar tiempo en una situación crítica.

3. Nunca uses ascensores durante un incendio. Es una de las reglas más importantes. Los ascensores pueden fallar, quedar atrapados o llevarte directamente a una planta en llamas. Siempre opta por las escaleras de emergencia.

4. A medida que salgas del lugar, cierra las puertas detrás tuyo. Este simple gesto puede frenar el avance del fuego, reducir la cantidad de oxígeno disponible y ganar tiempo valioso para que otros puedan evacuar. Además, ayuda a limitar los daños estructurales del edificio.

Recuerda: un incendio no da segundas oportunidades. Saber qué hacer y cómo moverse en esos momentos críticos puede marcar la diferencia. No subestimes la importancia de estos pasos. Estar preparado salva vidas.

Persona gateando en incendio. Escapando del fuego con paño en la boca. Seguridad contra incendios.

Qué hacer si estás en contacto directo con el fuego

Si las llamas te alcanzan, no corras: eso solo avivará el fuego. En su lugar, tirate al suelo, cubrí tu rostro con las manos y comienza a rodar sobre tu cuerpo. La técnica de “detenerse, tirarse y rodar” es muy efectiva para sofocar las llamas al quitarles oxígeno. Si ves que otra persona está prendida fuego, ayúdala: hazla acostarse y envuélvela con una manta, una chaqueta o lo que tengas a mano, presionando para apagar el fuego. Evita usar materiales sintéticos que puedan derretirse y empeorar la situación.

Qué hacer si estás atrapado en una habitación

Si estás en una habitación cerrada y ves que sale humo por debajo de la puerta o al tocarla está caliente, no la abras. El fuego puede estar justo del otro lado. En su lugar, abrí una ventana para dejar salir el humo y que entre aire fresco. Si no hay humo visible y la puerta no está caliente, ábrela con mucho cuidado. Si al hacerlo notas demasiado humo o directamente ves fuego en el pasillo, cierrala de inmediato. Sella las rendijas con trapos o toallas mojadas para frenar la entrada del humo y hazte visible desde la ventana, agitando una prenda o linterna si es de noche.

En una situación de incendio, cada segundo cuenta. Saber cómo actuar en distintos escenarios puede ser vital para sobrevivir y ayudar a otros.

¿Qué hacer en caso de incendio? Guía rápida que puede salvar tu vida | 2

Qué hacer si no puedes evacuar durante un incendio

Si estás en una habitación y el humo ya invadió las escaleras del edificio o la casa, lo mejor es quedarte donde estás. Cierra muy bien la puerta para aislar el fuego y, si puedes, abrí las llaves de agua del baño o la cocina. Usa esa agua para mojar toallas, frazadas o prendas de ropa.

Coloca la ropa mojada en las rendijas de la puerta, especialmente en la parte inferior, para impedir que el humo tóxico entre en la habitación. Esto es clave, ya que el humo mata más que el fuego. Si tienes una ventana accesible, ábrela. Puede servirte para respirar mejor, llamar la atención de los rescatistas y, en última instancia, como vía de escape si no hay otra salida.

Un punto muy importante: aunque sientas miedo o estés en pánico, nunca te escondas debajo de una cama o dentro de un armario. Eso complica muchísimo que los bomberos puedan encontrarte. Si te ocultas, pueden pasar de largo sin saber que estás ahí. Recuerda que en una emergencia, los equipos de rescate van a buscarte. Tu misión es mantener la calma, protegerte del humo y hacerte visible para que puedan ayudarte cuanto antes.

Saber cómo reaccionar en un incendio no solo aumenta tus chances de sobrevivir, también puede marcar la diferencia para quienes te rodean.

Edificio en llamas. Bomberos luchando contra incendio. Camión de bomberos.

Después del incendio y cómo usar un extintor

Si lograste salir del inmueble, avisa al resto de las personas del lugar y llama a los bomberos de inmediato, incluso si el fuego parece pequeño. Si no implica un riesgo mayor, corta el suministro eléctrico y de gas, y retira productos inflamables cercanos. Nunca regreses al inmueble hasta que los bomberos lo autoricen.

Ahora, si tienes un extintor a mano, usalo así:

Primero, tira de la anilla de seguridad (la que está junto al asa). Situate a unos dos metros del fuego, coloca el extintor en posición vertical y apunta a la base de las llamas, no a la parte alta del fuego. Hace un movimiento en zigzag para cubrir toda la zona de combustión. Si estás al aire libre, vacia el extintor a favor del viento.

No le des la espalda al fuego, y si hay más de un extintor, lo mejor es usarlos al mismo tiempo, no de a uno. Incluso si logras apagar las llamas, vacia completamente el extintor. No sirve dejarlo a medias: igual deberá ser recargado después.

Y por último: no te olvides que la calma y la prevención son las mejores aliadas en estas situaciones. Tener un plan, saber actuar y conocer tus herramientas pueden hacer toda la diferencia. Porque aunque no creas que te va a pasar… más vale prevenir que apagar fuegos.

¿Qué hacer en caso de incendio? Guía rápida que puede salvar tu vida | 3

You may also like