Cuando los científicos observan el universo, notan que se está expandiendo a un ritmo acelerado. Sin embargo, si solo estuviera compuesto de materia visible, este fenómeno no tendría sentido. Debe haber una fuerza invisible impulsando esta expansión. Aunque no sabemos con exactitud qué es ni de dónde proviene, sí sabemos que existe.
Esto te puede sorprender, pero desconocemos de qué está compuesta la mayor parte del universo. Quizás pienses en galaxias, estrellas, planetas, agujeros negros, cometas y asteroides, pero, aunque parezca increíble, todo eso representa solo una pequeña fracción del cosmos.
¿Qué es la energía oscura?
Los astrónomos han bautizado este misterioso fenómeno como energía oscura, una forma de energía que impregna todo el espacio. Las observaciones de supernovas indican que su influencia aumenta a medida que el universo se expande, acelerando su crecimiento en lugar de frenarlo.
En otras palabras, algo desconocido está jugando un papel crucial en el destino del cosmos. Y aunque aún no comprendemos completamente su naturaleza, la energía oscura sigue siendo una de las mayores incógnitas de la física moderna.
Materia oscura y energía oscura: los misterios invisibles del universo
Sin la materia oscura, los científicos creen que las galaxias jamás se habrían formado. Esto se debe a que la gravedad de la materia visible no sería suficiente para mantenerlas unidas. El universo parece estar perfectamente equilibrado: la materia oscura proporciona la atracción gravitacional necesaria para formar galaxias, mientras que la energía oscura impulsa su expansión acelerada.
¿Cuánta energía oscura hay en el universo?
Aunque aún sabemos poco sobre la energía oscura, los datos indican que constituye el 68% del universo. Es decir, casi dos tercios de todo lo que existe está compuesto por algo completamente desconocido.
Materia oscura: el pegamento invisible del cosmos
Además de la energía oscura, existe algo en el universo con una fuerza gravitacional que mantiene unidas a las estrellas y galaxias. No es materia común, ni agujeros negros, ni nada que hayamos visto antes, pero su influencia es innegable. A esto los científicos lo llaman materia oscura.
Este misterioso material no absorbe, refleja ni emite luz, por lo que no puede ser detectado directamente. Sin embargo, su existencia se deduce por los efectos gravitacionales que provoca en los cuerpos celestes. Resolver el enigma de la materia oscura es uno de los mayores desafíos de la cosmología actual.
Materia oscura: el enigma que sostiene el universo
Los científicos estudian la materia oscura observando los efectos que produce en los objetos visibles. Su influencia se hace evidente en los movimientos inexplicables de las estrellas dentro de las galaxias, lo que sugiere la presencia de una fuerza gravitatoria invisible.
¿Qué es la materia oscura?
A lo largo de los años, han surgido múltiples teorías sobre la naturaleza de la materia oscura. Algunas hipótesis apuntan a que podría estar formada por objetos normales no luminosos, como gases fríos, galaxias oscuras o halos compactos y masivos (MACHOs), que incluirían agujeros negros y enanas marrones.
Otras teorías sugieren que la materia oscura se compone de partículas exóticas creadas en las primeras etapas del universo. Entre ellas se encuentran los axiones, las partículas masivas débilmente interactuantes (WIMPs) y los neutrinos.
La clave para comprender el universo
Entender la materia oscura es fundamental para descifrar el tamaño, la forma y el destino del universo. Su cantidad determinará si el universo es abierto (expansión infinita), cerrado (expansión y posterior colapso) o plano (expansión que se detiene en equilibrio).
Además, su estudio es esencial para comprender cómo se formaron y evolucionaron las galaxias. Si solo existiera materia visible, las galaxias deberían desmoronarse al girar. Sin embargo, esto no ocurre porque una fuerza gravitacional oculta las mantiene unidas. Esa fuerza es, sin duda, la materia oscura.
El universo desconocido: materia oscura y energía oscura
Al igual que la energía oscura, hay mucho que aún no sabemos sobre la materia oscura. Sin embargo, los estudios indican que aproximadamente el 27% del universo está compuesto por esta misteriosa sustancia.
Si sumamos la materia oscura (27%) y la energía oscura (68%), obtenemos un 95% del universo completamente desconocido. Es decir, todo lo que conocemos—planetas, estrellas, galaxias y la radiación electromagnética—representa apenas el 5% del cosmos.
Un misterio por resolver
La materia oscura y la energía oscura son dos de los mayores enigmas en la exploración del espacio y la física moderna. Científicos de todo el mundo emplean observaciones astronómicas, cálculos matemáticos y experimentos avanzados para intentar descifrar qué son y cómo afectan al universo.
Comprender estos fenómenos no solo nos permitirá resolver preguntas fundamentales sobre la estructura del cosmos, sino que también podría revelar nuevas leyes de la física. El universo es un rompecabezas fascinante, y aunque aún desconocemos la mayor parte de su composición, cada descubrimiento nos acerca un poco más a desentrañar sus secretos.
El “huracán de materia oscura” que atraviesa la Vía Láctea
Los científicos han identificado una oportunidad única para detectar la materia oscura, gracias a un fenómeno cósmico que atraviesa nuestra galaxia: un vendaval de materia oscura.
Un hallazgo sin precedentes
Este fenómeno fue detectado en 2017 con el telescopio Gaia, y su análisis fue publicado en 2018 en la revista Physical Review por el investigador Ciran O’Hare, de la Universidad de Zaragoza.
Según O’Hare, la Tierra se encuentra en medio de la corriente estelar S1, formada por los restos de una galaxia que la Vía Láctea devoró hace miles de millones de años. Esta corriente viaja a 500 km/s, lo que provoca un flujo excepcionalmente rápido de materia oscura, creando lo que los científicos llaman un «huracán de materia oscura».
¿Cuánto durará este fenómeno?
Aunque es imposible predecir con exactitud, O’Hare estima que la Tierra permanecerá inmersa en este mar de materia oscura por miles de años. Gracias a este evento, los científicos esperan obtener información clave en la próxima década, lo que podría llevarnos un paso más cerca de resolver el misterio de la materia oscura y su impacto en el universo.
¿Podrá el huracán de materia oscura revelar sus secretos?
Los científicos esperan que esta inmensa masa de materia oscura, equivalente a diez mil millones de soles, ayude a comprobar teorías que hasta ahora solo existen en simulaciones computacionales.
Las partículas que podrían componer la materia oscura
Uno de los mayores objetivos es la detección de las partículas WIMP (Weakly Interacting Massive Particles), candidatas principales para explicar la materia oscura. Estas partículas interactúan de forma extremadamente débil, lo que hace difícil su detección directa.
Con la presencia del huracán de materia oscura, los científicos esperan que WIMPs colisionen con otros átomos, lo que permitiría su detección en laboratorios y observatorios avanzados.
Si los WIMPs no son la clave, hay otra posibilidad: los axiones, partículas ultraligeras que podrían convertirse en fotones de energía luminosa o electromagnética, facilitando su identificación.
Un evento clave para la ciencia
Este fenómeno representa una oportunidad única para responder a una de las mayores incógnitas del universo: ¿de qué está hecha la materia oscura? Los científicos esperan que en los próximos años podamos descubrir la partícula fundamental que compone gran parte del cosmos pero que, hasta ahora, sigue siendo invisible.
