¿Por qué los gatos amasan con las patas?
Los gatos tienen una manera única y tierna de demostrar su cariño: amasando a sus dueños. Si tu gato te ofrece este pequeño «masaje», considérate afortunado, ¡y muy querido! Según un estudio sobre el comportamiento felino de la Universidad de Florida, este gesto es una forma de expresar cuánto le importas y lo especial que eres para él. Al amasar, los gatos están transmitiendo su afecto y confianza.
Pero, ¿por qué lo hacen? Este comportamiento no es solo una manera de mostrar amor; también tiene sus raíces en su infancia. Cuando los gatos son pequeños, al amasar las glándulas mamarias de su madre, estimulan la producción de leche. Este acto se asocia con la liberación de oxitocina, la «hormona del amor», lo que crea una sensación de bienestar y felicidad. De ahí que, de adultos, este acto se mantenga como un gesto reconfortante.
La veterinaria Sylvia Arrau Barra, de la Universidad del Pacífico, explica que los gatos también utilizan el amasado como una forma de marcar su territorio. Al hacerlo, las feromonas en sus patas dejan su sello personal sobre ti, haciendo de ti un «territorio» especial para ellos. Este comportamiento es especialmente común antes de dormir, cuando los gatos se sienten más relajados y suelen prepararse para una noche de descanso, amasando mientras se acicalan y ronronean.
En resumen, amasar es un comportamiento natural en los gatos, cargado de sentimientos de amor, seguridad y bienestar. Así que la próxima vez que tu gato te dé un «masaje», solo recuerda que lo hace porque te quiere.

¿Por qué no hay comida azul?
Aunque a menudo nos referimos a algunas frutas como azules, como los arándanos, las moras o las uvas, en realidad su color es más cercano al púrpura o al violeta. No existe, como algunos niños dirían, un auténtico «color pitufo» en la naturaleza. Pero, ¿por qué casi no encontramos alimentos realmente azules?
Primero, debemos entender que el color verde en las plantas se debe a la clorofila, un pigmento fundamental para la fotosíntesis. Sin embargo, el azul es un pigmento muy complejo de obtener en el mundo natural. Las flores azules, por ejemplo, deben su color a una química muy alcalina. Esto es algo poco común, ya que la mayoría de las plantas y animales tienen un metabolismo más ácido.
En el caso de las plantas con flores azules, este color depende del pH del suelo. Un pigmento orgánico llamado antocianina es el responsable de esta coloración. Cuando el suelo es ácido, las flores tienden a volverse rosas o rojas, mientras que en un suelo alcalino adoptan un color azul. Por ejemplo, las violetas se tornan azules debido a la alcalinidad del suelo.
El azul es un pigmento raro en la naturaleza. Esto se refleja no solo en los vegetales, sino también en los animales, ya que no encontramos muchas criaturas que presenten este color. En el caso de los animales marinos, su color azul se debe más a una iridiscencia causada por la dispersión de la luz en sus pieles o escamas, no a un pigmento real.
Además, los insectos, que juegan un papel crucial en la polinización de las plantas, no pueden distinguir el color azul. Esto explica por qué el azul no ha evolucionado como un color predominante en las plantas, ya que dificultaría la polinización.
A nivel evolutivo, también hay un factor relacionado con nuestra percepción. ¿Qué preferirías comer: una fresa azul o una fresa roja y jugosa? Es probable que te atraiga más la fresa roja, ya que los colores como el rojo, amarillo y verde están asociados con alimentos ricos en vitaminas, antioxidantes y nutrientes esenciales. En este sentido, nuestras preferencias también han sido moldeadas para elegir alimentos beneficiosos para nuestra salud.

¿Cómo se producen las ojeras?
Las ojeras son una preocupación común, y a menudo se asocian con la falta de sueño o momentos de agotamiento. Aunque esto es cierto, el origen de las ojeras tiene también un componente genético que juega un papel crucial.
Para entender por qué aparecen las ojeras, primero debemos saber qué las causa. La clave está en los vasos sanguíneos. La piel alrededor de los ojos es extremadamente fina, con un grosor de solo 0,5 mm, menos de la mitad del grosor de la piel en otras partes del cuerpo, que suele ser de 2 mm. Esta delgadez hace que la piel sea casi translúcida, lo que permite que los vasos sanguíneos que se encuentran debajo de ella sean más visibles.
Cuando hablamos de ojeras relacionadas con la falta de descanso, ¿por qué se producen? La respuesta está en la hormona cortisol. Cuando estamos cansados, nuestro cuerpo produce más cortisol, una hormona que aumenta los niveles de energía para mantenernos despiertos y activos. Uno de los efectos secundarios del cortisol es que aumenta el volumen de sangre que circula por nuestro cuerpo. Como los vasos sanguíneos se «cargan» de sangre adicional, se agrandan, y al ser más visibles a través de la piel fina de los ojos, las ojeras se hacen más notorias.
Pero, ¿por qué algunas personas tienen ojeras más marcadas que otras, y por qué pueden variar de un día para otro? A medida que envejecemos, nuestra piel pierde elasticidad y su capacidad para regenerarse. Esto provoca que la piel se vuelva cada vez más delgada, lo que hace que las ojeras sean más prominentes, especialmente en personas mayores.
En el caso de algunas personas, el factor genético juega un papel importante. Aquellos que están genéticamente predispuestos a tener ojeras tienden a tener una piel más fina alrededor de los ojos, lo que hace que los vasos sanguíneos sean aún más visibles, provocando ojeras más marcadas.

¿Por qué los asiáticos comen con palillos?
Comer con palillos es una tradición profundamente arraigada en Asia, especialmente en países como China y en gran parte de Asia oriental, desde Japón hasta el este de Tailandia. Estos utensilios se utilizan para comer ciertos guisos y platos, y su origen tiene una historia interesante.
La costumbre de usar palillos comenzó cuando los antepasados de estas culturas necesitaban palos de madera o bambú para manipular los alimentos mientras los cocinaban sobre las hogueras, evitando quemarse los dedos. Con el tiempo, este utensilio se convirtió en una herramienta para la alimentación diaria, y de ahí nació la tradición de comer con palillos.
Las primeras referencias a estos utensilios, conocidos como «zhu» en las escrituras chinas antiguas, se encuentran en la dinastía Shang, hace unos 5,000 años. Sin embargo, los hallazgos más tangibles de palillos se remontan a hace más de 3,200 años, cuando se encontraron en las Ruinas de Yin, en China, seis palillos de bronce.
Durante la era de Confucio, alrededor de los siglos V y IV a.C., los palillos adquirieron un significado filosófico y cultural más profundo. Se los veía como un símbolo de no violencia, ligado a las enseñanzas de vegetarianismo y zen. El cuchillo y el tenedor, por el contrario, representaban violencia, guerra y avaricia, ya que en la tradición china, la comida se corta en trozos pequeños para que pueda ser comida con los palillos de una manera meditativa, fomentando la calma y el equilibrio, especialmente en tiempos de pobreza.
Además de su significado filosófico, los palillos también son parte integral de la cultura familiar china. En las mesas chinas, es considerado de mala educación usar los palillos para golpear los cuencos o vasos, un gesto reservado para los mendigos que piden comida en las calles.
Aunque hoy en día, especialmente en los restaurantes chinos de todo el mundo, el cuchillo y el tenedor también se usan, en China los palillos siguen siendo los utensilios predominantes, representando no solo una forma de comer, sino también una profunda tradición cultural.

¿Cuál es la diferencia entre los 5 océanos?
Los océanos son enormes extensiones de agua marina que cubren la mayor parte de la superficie terrestre. Estos se formaron hace unos 4.000 millones de años y están separados por grandes masas de tierra, conocidas como continentes o archipiélagos. A continuación, te explicamos las características principales de los cinco océanos que existen en nuestro planeta.
1. Pacífico: 200.700.000 km²
El océano más grande de la Tierra, cubriendo aproximadamente un tercio de la superficie terrestre. Se extiende unos 15.000 km desde el Mar de Bering en el Ártico, al norte, hasta el Mar de Ross en la Antártida, al sur. En él se encuentran más de 25.000 islas, que superan en número a todas las islas de los demás océanos combinados. La mayor parte de estas islas están situadas al sur del ecuador.
2. Atlántico: 106.400.000 km²
Este océano separa América de Europa y África. Se extiende desde el Océano Glacial Ártico, en el norte, hasta la Antártida, en el sur, y es dividido por el Ecuador en dos partes: Atlántico Norte y Atlántico Sur. Su forma de “S” le otorga una extensión de unos 106,4 millones de km², lo que lo convierte en el segundo océano más grande del mundo, cubriendo aproximadamente el 20% de la superficie terrestre.
3. Índico: 73.556.000 km²
El Océano Índico es el tercer océano más grande y cubre aproximadamente el 20% de la superficie terrestre. Está limitado al norte por Asia, al oeste por la Península Arábiga y África, al este por la Península Malaya, las Islas Sonda y Australia, y al sur por la Antártida.
4. Antártico: 20.327.000 km²
El Océano Antártico rodea la Antártida y se extiende hasta los 60° S, lo que lo convierte en el cuarto océano en extensión. Fue formalmente definido en el año 2000 por la Organización Hidrográfica Internacional. Este océano, junto con el Ártico, es uno de los pocos que circundan el globo terrestre, abrazando completamente el continente antártico.
5. Ártico: 14.090.000 km²
El Océano Ártico es el más pequeño y se encuentra alrededor del Polo Norte. Se extiende hacia el norte de Europa, Asia y América, y está conectado con el Océano Atlántico a través del Estrecho de Fram y el Mar de Barents. También tiene contacto con el Pacífico a través del Estrecho de Bering, entre Rusia y Alaska.

¿Cómo y por qué cambian de color los camaleones?
Un estudio reciente realizado por científicos suizos ha desvelado el secreto detrás del impresionante cambio de color de los camaleones. Según los hallazgos publicados en la revista Nature Communications, estos reptiles logran modificar los vívidos colores de su piel reordenando los nanocristales dentro de células especializadas, en lugar de simplemente reunir o dispersar pigmentos como se pensaba anteriormente.
La investigación reveló que los camaleones poseen un «espejo selectivo» compuesto por estos nanocristales. Además, descubrieron una segunda capa de células que refleja la luz en la región del infrarrojo cercano, lo que podría ayudarles a regular su temperatura corporal.
«Los camaleones inventaron algo completamente nuevo en la evolución», comenta Michel Milinkovitch, uno de los autores del estudio. «Dividieron las células con pigmentos en dos capas: una especializada en cambiar los colores y otra que reduce la cantidad de energía absorbida», añade.
Este sistema les permite no solo comunicarse a través de una gama de colores vibrantes, sino también controlar su temperatura. Los colores en los camaleones se producen mediante dos procesos: las células llenas de pigmentos crean colores cálidos u oscuros, mientras que los colores brillantes como el azul o el blanco surgen por la dispersión de la luz a través de estructuras físicas como los cristales, fenómeno conocido como colores estructurales.
Un verde brillante, por ejemplo, puede resultar de una combinación de un azul estructural con un pigmento amarillo. Además, el camaleón puede cambiar su tonalidad según el entorno o sus emociones, como cuando un macho se encuentra con un competidor, pasando de un verde camuflaje a un amarillo brillante.
Los investigadores, especializados en biología y física cuántica, notaron que los camaleones no tienen células grandes con pigmentos amarillos o rojos, lo que dificultaba la explicación de su cambio de color. Al estudiar los cromatóforos, las células responsables del color en su piel, con un microscopio electrónico, observaron que los cristales formaban un patrón ordenado y regular, lo que influye en la luz reflejada, generando los vivos colores del camaleón.
Al analizar las imágenes de los cambios de tonalidad en los camaleones, el equipo descubrió un patrón que no podía explicarse solo por los pigmentos. Cuando incorporaron el efecto de modificar el orden de los cristales, el modelo resultó ser un reflejo exacto de los cambios observados en la piel del camaleón.
Este «espejo selectivo» actúa al reflejar ciertas longitudes de onda de la luz dependiendo de la distancia entre las capas de cristales. Cuando los cristales están más apretados, reflejan colores como el azul, y cuando se distancian, reflejan colores más cálidos, como el rojo.
